Durante el embarazo tu cuerpo sufre cambios hormonales que pueden aumentar el riesgo de sufrir alguna infección, como por ejemplo la listeriosis (también llamada listeria).
La listeriosis es una infección causada por la ingesta de alimentos contaminados por una bacteria conocida como Listeria monocytogenes.
Esta bacteria se encuentra por todo nuestro entorno, en el agua, el lodo, los suelos, las superficies de trabajo (como por ejemplo las cocinas), los vegetales y los animales salvajes.
Además se trata de una bacteria resistente a condiciones adversas que puede vivir en medios:
- Con alta concentración de sal (10-12% de cloruro sódico).
- Con bajas temperaturas (refrigeración hasta 4ºC).
- Ácidos (con ph de 4’4).
Todos estos factores favorecen la contaminación de alimentos en la cadena alimentaria: durante el almacenamiento, la elaboración y su posterior conservación.
La listeriosis es una infección oportunista que afecta a personas vulnerables (los mayores de 65 años tienen 7’5 veces más riesgo que otro adulto) o con un sistema inmunitario alterado, como es el caso de los bebés o las mujeres embarazadas.
- Las mujeres embarazadas tienen 20 veces más riesgo que otro adulto.
- El feto tiene 15 veces más riesgo.
- Los bebés recién nacidos tienen 30 veces más.
La listeriosis puede transmitirse de la madre al feto a través de la placenta a pesar que la madre no presente signos o síntomas de la enfermedad. Esto puede causar:
- Parto prematuro.
- Aborto espontáneo.
- Muerte fetal.
- Problemas de salud graves en el recién nacido.
Síntomas producidos por la listeria
Los síntomas pueden aparecer al cabo de pocos días o incluso semanas después de consumir los alimentos contaminados. A la menor sospecha debes acudir al médico para descartar la enfermedad o recibir tratamiento antibiótico (que te protejan tanto a ti como a tu bebé de la infección).
Los síntomas que puedes tener son parecidos a los de una gripe: fiebre, escalofríos, dolor muscular, náuseas y diarrea o dolor estomacal.
Cuando la enfermedad avanza sin tratamiento puede pasar a la sangre (produciendo una septicemia) o al sistema nervioso central (produciendo una meningitis).
Si la infección se propaga al sistema nervioso central los síntomas pueden incluir: dolor de cabeza, rigidez de cuello, confusión, pérdida del equilibrio y convulsiones.
Cómo prevenir la listeria
Lo mejor para evitar la infección es tomar medidas de prevención con la higiene, la preparación y conservación de los alimentos y evitar ciertos productos.
Es importante que te laves las manos antes y después de manipular los alimentos. También extrema la limpieza de los utensilios y las superficies de la cocina lavándolos con agua caliente y jabón. En cuanto a las verduras y vegetales lávalos con abundante agua.
Durante la cocción asegúrate que se alcance los 75º en el interior de los alimentos; además evita comer las carnes al punto o poco hechas.
Separa los alimentos crudos de los alimentos cocinados y sobre todo evita el contacto de ambos en la nevera. Limpia con frecuencia los estantes de la nevera, en especial si ha habido algún derrame.
Consume los alimentos al poco tiempo de su elaboración. Cómo máximo mantelos a temperatura ambiente durante 2 horas. Si vas a consumir restos de otras comidas debes calentarlas previamente hasta que los alimentos alcancen nuevamente los 75º en el interior.
Alimentos que no debes consumir si estás embarazada
No consumas los siguientes alimentos:
- Leche cruda (sin pasteurizar).
- Quesos blandos: Brie, Feta, Camembert, Mozzarella, queso fresco o blanco. Hoy en día muchos de estos quesos están hechos con leche pasteurizada, pero debe constar en la etiqueta del producto.
- Las salchichas tipo frankfurt sin cocinar. Evita los jugos de los paquetes de estos productos, así como de fiambres o carnes precocinadas.
- Los patés y carnes untables refrigerados. Puedes comer los patés enlatados o envasados.
- Mariscos o pescados ahumados a menos que hayan sido calentados o cocinados previamente.
- Carnes o pescados crudos (sushi, bistec tartar, carpaccio,…).
Julia dice
Si consumí queso mozzarela pasteurizado ( 8 días después de su fecha preferente ) sin abrir conservado en nevera… Sin darme cuenta lo consumí y me di cuenta al día siguiente de consumirlo….no tenía mal sabor ni mal estado… Estoy embarazada de 30 semanas y estoy muy preocupada!! Saludos