Los entuertos son una respuesta fisiológica del organismo tras el parto. A lo largo de los nueve meses de embarazo tu útero se ha ido ensanchando para albergar a tu bebé. Ha pasado del tamaño de una pequeña pelota de tenis (9 x 6 cm. aproximadamente) a la de tu bebé (unos 50 cm. más o menos).
Cuando nazca tu bebé las hormonas, una vez más, ayudarán a que tu útero vuelva a su tamaño habitual. Esta hormona es la misma que ha producido las contracciones del parto y ayudará a la salida de la leche cuando tu bebé succione: la oxitocina.
Los entuertos o contracciones postparto son una respuesta fisiológica para devolver el útero a su tamaño normal
Los entuertos son las contracciones o espasmos que la oxitocina continuará produciendo durante los días siguientes al parto. Estos espasmos ayudan a la contracción de los músculos y que poco a poco todas las estructuras abdominales vuelvan a su sitio. Este proceso se llama involución y puede ser doloroso. Además las contracciones del útero evitan posibles hemorragias después del parto debido a una atonía (falta de fuerza) de los músculos.
En los hospitales y clínicas se administra ,una vez a nacido el bebé, una dosis de oxitocina para provocar la salida rápida de la placenta, evitando así el riesgo de hemorragia e iniciar el proceso que posteriormente realizarán de manera fisiológica los entuertos.
Si eres madre primeriza puede que los calambres o espasmos que se producen después del parto casi ni los notes. Tu útero tiene un buen tono muscular y se mantiene contraído una vez comienzan las contracciones de parto y no se relaja. En cambio, si estás en tu segundo embarazo es posible que notes estos espasmos de una manera más intensa y dolorosa. Esto es debido a que el útero ya ha sufrido más de una distensión y, a diferencia del primer embarazo, una vez que finalizan las contracciones del parto el útero se contrae y relaja de manera intermitente. Los entuertos son más dolorosos cuanto más embarazos se tengan.
¿Cuándo se notan los entuertos?
Puede que los notes a partir de las 24-48 horas después de dar a luz y empiecen a desaparecer a partir del tercer o cuarto día, aunque tu útero tardará unas 6 semanas en volver a su tamaño y posición habitual. Este tiempo es el periodo que se conoce como el puerperio.
El dolor de los entuertos puede presentarse o aumentar mientras das de mamar a tu bebé. Como hemos dicho antes la oxitocina es una hormona que se segrega cuando el bebé succiona y esto le facilita la salida de la leche. Esto es positivo, ya que a mayor número de contracciones más rápido será el proceso de involución.
Si tu parto ha sido por cesárea es posible que los entuertos sean algo más dolorosos a causa del propio dolor de la cicatriz.
¿Cómo calmar el dolor que provocan los entuertos?
Si los entuertos son muy intensos, para aliviarlos puedes:
- Realizar masajes sobre tu abdomen haciendo una suave presión desde la zona donde empieza tu útero hacia abajo. Intenta realizar este masaje cuando no presentes un entuerto. Esto ayuda a que la contracción del útero sea más continua y alivia el dolor.
- Orina con frecuencia. Cuando la vejiga está llena desplaza el útero e impide la contracción uterina, lo que se traduce en un aumento del dolor.
- Aplicar calor y realizar cambios posturales frecuentes pueden ayudar a aliviar el dolor ya que relajan la musculatura.
Ante todo recuerda que los entuertos son normales y beneficiosos para tu recuperación durante el puerperio. Pero si son muy dolorosos o se acompañan de algún otro síntoma, como fiebre o sangrado abundante, no dudes en consultar con tu comadrona o ginecólogo.
Foto: Copyright: maaltu / 123RF Stock Photo
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