Mirar a un bebé cuando duerme, contemplarlo mientras sientes su suave respiración y pensar que no hay nada más placentero que su descanso es algo que nos ha pasado a cualquiera de nosotros.
Recuerdo los primeros días en casa con mi bebé, la necesidad constante de mirarlo mientras dormía para asegurarme que estaba bien. Los recién nacidos no se mueven prácticamente mientras duermen y aún son muy pequeños para darse la vuelta, por eso ante tanta quietud los padres acostumbramos a velar sus sueños.
A medida que crecen las cosas cambian y es posible que cuando vayas a despertar a tu bebé lo encuentres del revés, con los pies en la cabecera o la manta hecha un ovillo.
¿Por qué vigilamos los padres tanto el descanso de nuestros bebés?
Aunque poco frecuente el síndrome de la muerte súbita del lactante es uno de los mayores temores de los padres. Es una experiencia horrible encontrarse delante de unos padres que han dejado a su bebé durmiendo tranquilamente y unas horas después al extrañarles que no se despierte vayan a verlo y se encuentren que no respira.
Síndrome de la muerte súbita del lactante
El Comite de Muerte Subita Infantil de la Asociación Española de Pediatría define el Síndrome de la Muerte Súbita del Lactante (SMSL) como:
Muerte súbita de un niño de menos de un año de edad, que ocurre aparentemente durante el sueño y que permanece sin explicación después de la realización de una minuciosa investigación postmortem, que incluye la práctica de la autopsia, examen del lugar del fallecimiento y revisión de la historia clínica.”
Se relaciona el SMSL con una incapacidad del bebé para reaccionar durante el sueño ante una amenaza para la vida interna (apnea prolongada, arritmia, hipotensión,…) o externa, así como incapacidad en su cuerpo para detectar un acúmulo de dióxido de carbono en sangre.
El periodo de mayor incidencia del SMSL es entre los 2 y 4 meses de vida. Es poco habitual que se den casos durante el primer mes de vida y el riesgo se reduce a medida que el bebé crece. A partir de los 12 meses el riesgo practicamente ha desaparecido.
Las estadísticas denotan que los casos de SMSL aumentan en los meses más húmedos y fríos (otoño-invierno) y son más frecuentes en niños que en niñas.
¿Puede evitarse la muerte súbita?
Es cierto que se desconoce la causa, pero múltiples estudios han demostrado que existen factores que aumentan el riesgo de muerte súbita en el lactante, así como medidas que ayudan a prevenirla.
Factores de riesgo
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Factores relacionados con la madre:
- Cuidados prenatales y control del embarazo: los lactantes cuyas madres han tenido un seguimiento durante la gestación tienen menor riesgo de padecer SMSL.
- La lactancia materna es un factor de protección frente al SMSL.
- Se ha relacionado la exposición prenatal y postnatal a hábitos tóxicos como el alcohol o las drogas con un riesgo elevado de SMSL.
- Existe una relación demostrada en múltiples investigaciones y estudios entre el tabaco y el SMSL. El riesgo de SMSL es muy alto en lactantes que comparten cama o habitación con un adulto fumador.
- Hay factores socioeconómicos y demográficos relacionados con el SMSL: un bajo nivel socioeconómico, educacional y una pobre red de apoyo. Así como madres menores de 20 años o tener más de tres hijos.
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Factores relacionados con el niño:
- Antecedentes de hermano fallecido por SMSL: el riesgo de recurrencia en hijos posteriores se ha estimado que es 5 veces mayor que la incidencia en la población general. En los gemelos existe un riesgo de hasta el 4% en las primeras 24 horas después del fallecimiento del hermano. Pasado ese tiempo, el riesgo es igual que el de los hermanos en general.
- Prematuridad y bajo peso al nacer: los estudios confirman una asociación significativa entre bajo peso al nacer y SMSL, sobre todo por debajo de los 2.500Kg.
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Factores relacionados con el ambiente:
- Posición del bebé en la cuna: se ha constatado en múltiples estudios la asociación entre SMSL y la posición prono o boca abajo para dormir.
- Ambiente del dormitorio: colocar al bebé en superficies blandas y estar rodeado de accesorios sueltos (mantas, edredones, almohadas, cojines, colgantes al cuello…) aumenta hasta 5 veces el riesgo de SMSL.
- Arropamiento excesivo y cubrir la cabeza del bebé con la ropa de cama.
Medias para prevenir la muerte súbita
- El principal factor de riesgo modificable y que ha supuesto un gran impacto en el descenso del caso de muertes por SMSL es la posición para dormir del bebé en la cuna. Evita la posición prono (boca abajo) durante el sueño desde el periodo neonatal hasta el año de vida, especialmente hasta los 6 meses de edad. La posición más adecuada es el decúbito supino o boca arriba. El decúbito lateral o de lado es inestable y muchos de los bebés colocados así acaban en prono.
- Colocar al bebé en superficies firmes. Los colchones deben ser firmes y mantener su forma incluso cuando se haya colocado la ropa de cama, que debe ser ajustable.
- Evitar colocar alrededor del bebé en la cuna objetos blandos y cadenas al cuello.
- La temperatura de la habitación debe oscilar entre los 20 y 22ºC. Evitar el uso excesivo de capas de ropa y tapar al bebé hasta la cabeza. Se recomienda poner al bebé tocando con los pies en el borde inferior de la cuna y la ropa de cama hasta el pecho, bien remetida.
- Practica si se desea un colecho seguro. Para ello las recomendaciones del Comité de Lactancia Materna de la AEP son:
- La forma más segura de dormir para los lactantes menores de seis meses es en su cuna, boca arriba, cerca de la cama de sus padres. Existe evidencia científica de que esta práctica disminuye el riesgo de SMSL síndrome de muerte súbita del lactante en más del 50%.
- La lactancia materna tiene un efecto protector frente al síndrome de muerte súbita del lactante y, por otro lado, el colecho es una práctica beneficiosa para el mantenimiento de la lactancia materna, pero también se considera un factor que aumenta el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante por lo que no debe ser recomendado en:
- Lactantes menores de 3 meses de edad.
- Prematuridad y bajo peso al nacimiento.
- Padres que consuman tabaco, alcohol, drogas o fármacos sedantes.
- Situaciones de cansancio, sobre todo de cansancio extremo, como el postparto inmediato.
- Colecho sobre superficies blandas, colchones de agua, sofás o sillones.
- Compartir la cama con otros familiares, con otros niños o múltiples personas.
- Aquellos padres que deseen mantener una mayor proximidad con su bebé durante la noche, pueden optar por colocar la cuna al lado de la cama o utilizar una cuna tipo “sidecar” (superficie independiente adosada a la cama de los padres), que facilita la lactancia y no interfiere con la frecuencia de las tomas de pecho.
En el mercado se pueden encontrar diferentes aparatos que monitorizan la respiración y frecuencia cardíaca del bebé con el fin según las casas comerciales de prevenir el SMSL. En cambio los estudios han demostrado que su uso no evita o minimiza los casos de SMSL. Este tipo de monitores son útiles en los casos de bebés que presentan una enfermedad de base respiratoria, cardíaca o neurológica en los que se sabe existe un mayor riesgo de SMSL.
torrllll dice
Todos inauguramos nuestra paternidad con pocos conocimientos y los pocos vienen transmitidos por nuestros antecesores que nos dicen que hay que hacer y que evitar, pero pocos contamos con el consejo de gente
con conocimientos que nos asesoren de lo que hacer y cómo hacerlo. Problemas como la muerte súbita del lactante podrían evitarse si no hubiera desconocimiento de que eso ocurre y cuáles son sus causas.
Os transfiero conocimiento en http://causas-consecuencias.com/causas-sindrome-de-muerte-subita-del-lactante/
Claudia dice
Estuve buscando bastante infromacion y me encontré con un monitor que promete alertanos cuando hay una apnea o similar, supuestamente estoy monitores ya están funcionando en el 2020, queria saber si has podido conocer alguno, crees que puede ayudar? La información la encontré de una web que se dedica a hablar de diferentes monitores: https://monitorparabebe.com/monitor-para-bebe-con-sensor-de-respiracion/