Aproximadamente una de cada seis parejas tiene problemas de fertilidad. Tal y como vimos anteriormente en el artículo diferencias entre infertilidad y esterilidad esto no significa que no se pueda llegar a tener hijos, ya que muchas de estas parejas consiguen finalmente un embarazo.
Cuando este embarazo no se produce muchas parejas pasan por todo un periplo: tratamientos de fertilidad, fecundación in vitro, ovodonación, etc. En ocasiones todo esto no funciona y se opta por plantearse la adopción.
Existen también muchas otras opciones: parejas con hijos naturales que deciden acoger o adoptar un niño y ampliar de este modo su familia.
Sea por el motivo que sea, si estás pensando en acoger o adoptar un menor en tu familia debes saber que existen diferencias importantes entre la acogida y la adopción.