A los bebés les encantan los libros de telas. Son suaves, tienen diferentes texturas y divertidos colores. El problema es encontrar uno que reúna todas estas características y sea un buen estímulo visual y táctil para tu bebé.
En las tiendas acostumbran a vender libros creados en su totalidad por la misma tela, con un pequeño recuadro o triángulo diferente en cada página. Para unas manitas tan pequeñas es difícil acertar a tocar justo donde la textura cambia y la experiencia sensorial se pierde.
Por otro lado suelen tener dibujos poco realistas o con colores muy llamativos. Esto no es problema para un bebé de 18 meses que será capaz perfectamente de distinguir las formas y seguramente hasta entenderá la historia que se explica. El problema es que un bebé de 3 meses lo que necesita es más sencillo, como diferenciar un color de otro.
Además la gran mayoría están rellenos de guata y no se aprecia el peso real o espesor de cada tela. Si le añadimos que esta guata puede acompañarse de papel crujiente que hace ruido, la estimulación auditiva está garantiza, pero la táctil que es mucho más sutil se perderá.
Por eso cuando mi bebé tenía 3 meses decidí hacerle yo misma un libro de telas que le permitiera tener una experiencia táctil completa.
No es necesario ser una gran costurera, valdrá con que dispongas de aguja, hilo y sepas dar puntadas largas. Si tienes una maquina de coser y estás acostumbrada a hacer patchwork para ti este DIY es pan comido.
Lo primero que hice fue ir a la tienda de telas de nuestro barrio y preguntar por los retales de tela sobrantes que tenían. Como norma general los venden a peso y puedes encontrar telas muy bonitas y variadas por poco dinero. Yo tuve la suerte de tener la idea justo después de carnaval y pude llevarme verdaderas gangas.
Si no quieres gastar dinero en comprar telas, también puedes usar ropa vieja que vayas a tirar o hacer trapos. Lo único importante es que tenga texturas y colores diferentes.
Para el libro de mi bebé escogí telas como:
- licra
- toalla
- seda
- crepé
- chifón o tul.
- gasa
- paño
- tafetán
- fieltro
- etilvinilacetato o goma eva.
Además lo acompañé de muchísimas cintas de colores, tejidos o materiales diferentes. No sé si a tu bebé le pasa como al mío, pero es ver un lazo o un cordón y se vuelve loco estirando de él, enrollándolo en sus deditos o, como no podía ser de otra manera, chupándolo. Recuerda que la boca es su principal fuente de información durante los primeros meses.
En la mercería podrás encontrar cintas de:
- raso
- algodón
- elásticas
- cuero
- ganchillo
- puntilla
- nylon
- jacquard
- lentejuelas
Una vez tengas todas las telas y cintas lo único que necesitarás es:
- papel para hacer una plantilla
- regla
- bolígrafo
- tijeras
- aguja
- alfileres
- hilo (cualqueir color es válido)
- dos botones grandes (importante que sean como mínimo de 2 cm. de diámetro para evitar que, si se cae, tu bebé pueda tragárselo).
- dedal (opcional).
- tiza para ropa (opcional)
Si ya lo tienes todo, vamos a ponernos manos a la obra.
– Dibuja en el folio de papel un cuadrado de 15x15cm.
– Una vez lo recortes ya tendrás la plantilla.
– Estira el trozo de tela doblado por la mitad sobre una superficie plana.
– Con ayuda de los alfileres sujeta la plantilla.
– Puedes recortar la tela utilizando la plantilla directamente.
– También puedes dibujar con la tiza de ropa las marcas, te será más fácil recortarla
– Asegúrate de coger la tela doble y así solo tendrás que recortar una vez cada retal de tela.
– Con puntadas largas cose los cuatro lados del cuadrado.
– En uno de los lados deja un pequeño trozo sin coser.
– Las puntadas deben estar lo suficientemente juntas como para evitar que si tu bebé urga con el dedo lo pueda descoser.
– Dale la vuelta al «saquito» que te ha quedado.
– Termina de coser el extremo que faltaba. Para ello puedes hacerlo por dentro o con pequeñas puntadas por fuera.
– Repite la misma operación con cada retal de tela.
– No es imprescindible, pero sería recomendable que dejaras en todos los cuadrados de tela la misma distancia entre la orilla y el hilo.
– Recorta dos cuadrados de goma eva de 18x18cm para que así las tapas del libro sean un poco más grandes.
– Distribuye las telas intentando que se note la diferencia entre un tejido y otro.
– Intercala las cintas entre las telas (yo las hice de 20x20cm para que sobresalieran) y cóselas en diagonal, horizontal y vertical, esto hará que sea más divertido.
– Une un botón a la tapa de goma eva y uno a uno cose cada cuadrado de tela.
– Es importante que las puntadas queden en los agujeros del botón para evitar posibles roturas de la goma eva o que se suelte el hilo.
– Una vez unas el último cuadrado de tela coloca la otra tapa de goma eva y termina de asegurar la unión con el otro botón y ya estará listo.
Espero que te animes para que tu bebé pueda disfrutar de un libro de telas especial hecho por mamá y que será una delicia para sus sentidos. Las cosas hechas a mano son imperfectas y eso aún les da más encanto. Además sentirás la satisfacción de saber que le estas ofreciendo a tu bebé la posibilidad de desarrollarse de una manera tan rica y única.
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Laura dice
Me encanta el artículo, comparto!
Val dice
Hola, no entendí a partir del paso donde mencionan que una con un botón empiece a unir las partes, el libro se ve fácil y sencillo para mi bebé de 3 meses
Raquel dice
Me encantó el artículo!! Voy a ponerlo en práctica